La tele no se va de vacaciones
La televisión forma parte de nuestra rutina y en verano, las dos se descolocan. La parrilla da un vuelco: menos espectadores, menos ingresos publicitarios y más experimentos.


María Minaya
30.07.2025
Llegas a casa y mientras preparas la cena, Pasapalabra está en el rosco final. Te sientas escuchando las noticias y te tiras un rato en el sofá. Ahí si decides La Revuelta o El Hormiguero va a gusto del consumidor. Lo que todos compartimos es un ritual, que al final es en lo que consisten las rutinas. Pero, ¿qué pasa en verano?
Entre terraceos y viajes, esos horarios se descolocan y menos gente enciende la tele. Y los que lo hacen no encuentran lo que esperaban: Broncano está de vacaciones y Motos con reposiciones. Son cambios de parrilla inevitables que cada año buscan nuevos formatos con los que llenar esos huecos. A veces son temporales, como La Garita, que apenas ha durado dos días. Otros llegan para quedarse.
.
Los meses del “hemos venido a jugar”
Para descubrir algún que otro secreto detrás de la tele le pregunto a Sergio Navarro, redactor jefe en Fórmula TV. «Muchos de los grandes formatos que tenemos hoy se estrenaron en verano, ocurrió hace años con Los misterios de Laura. La cadena no confiaba y se sacó ya prácticamente cancelada», me comenta. La serie al final estuvo cinco años en emisión, triunfa en plataformas y su regreso está ahora en la cuerda floja de RTVE.
Hace solo un par de meses, Pasapalabra superaba los tres millones de espectadores únicos. Hoy todo el mundo sabe de qué trata el concurso, lo que pasa desapercibido es que su primera emisión fue en verano. El 24 de julio del 2000 Silvia Jato leía a trompicones todas las definiciones del rosco.
«Lo mismo pasó con El diario de Patricia y el año pasado con El diario de Jorge» recalca Sergio. Precisamente Jorge Javier Vázquez es uno de los presentadores que se fue asentando en la pantalla en sustituciones veraniegas. Y no es el único. En 2002 una joven Emma García se ponía al frente del programa de María Teresa Campos en Telecinco. Y todavía antes, en 1986 y al otro lado del charco, The Oprah Winfrey Show nacía aprovechando la menor competencia.
Son meses en los que se experimenta, se juega y se prueban cosas nuevas. El redactor de Fórmula TV lo explica: «En verano se ve menos tele, hay menos inversión publicitaria y las cadenas tienen menos dinero para hacer grandes formatos. Es la época en la que hay menos miedo a cagarla y más posibilidad de arriesgar».
Siguiendo esa línea, muchos canales optan por los concursos que requieren poca inversión, las reposiciones o el deporte. Este último suele ser una apuesta segura, que se lo digan a Mediaset. Solo con el Mundial de Clubes ha conseguido récords de share y una media de dos millones de espectadores, cifras que no están nada mal fuera de temporada.
Las plataformas se han unido al juego
Aunque la televisión siempre está funcionando, todos sabemos que no es lo mismo ponerse un programa repetido. Y en muchas situaciones la solución es darle al botón de YouTube o Netflix, que ya están hasta en los mandos, y poner algo nuevo. Fresco. ¿Qué significa? Que las plataformas han entrado en el juego y se está disputando algo muy importante. La audiencia. ¿Y si esos espectadores se van y no vuelven en septiembre?
Ese susto se dio la televisión tradicional cuando en 2017 HBO estrenó temporada de nada más y nada menos que de Juego de Tronos un 16 de julio. «Las plataformas siguen estrenando contenidos interesantes por lo que las cadenas tienen que sacar contenido y no poner una parrilla cutrona. No quieren perder la fidelidad y el hábito del espectador. Así han obligado a que se pongan las pilas para estar a la altura» confirma Sergio.
.png)
.png)
.png)
Como periodista especializado en televisión, Sergio me cuenta que hace años, en junio se terminaban las convocatorias de prensa para estrenos. Eso es algo que ha quedado atrás, «la maquinaria ya no para tanto como antes». Es uno de los motivos de la vuelta de formatos como Grand Prix. «Hace dos veranos volvió y era una apuesta bastante sorprendente porque lo hacía después de años y con modificaciones significativas, era un riesgo. Pero funcionó muy bien y vamos por el tercer año de esta nueva etapa».
En la ventana de al lado pasa lo mismo, para Netflix agosto es un mes clave. Se adelanta a los estrenos de otros, aprovecha el alto consumo por vacaciones y son las cifras que presenta a los inversores en octubre. Aun así, también experimenta con nuevas estrategias. Sobre todo con contenidos localizados por países.
En verano, mientras algunos no encienden la tele en días porque están de un lado para otro, los hay que aprovechan para echar un ojo a lo que no tienen tiempo de ver durante el curso. Cuando unos descansan, otros hacen que la máquina siga funcionando. Al final, todos somos un poco de las dos y the show must go on.

Vuelve a disfrutar de nuestros contenidos
Recuerda que puedes volver a ver todos los contenidos de MEDIA FESTIVAL aquí.